critican que la propuesta del pnv pretendía endurecer las posiciones sobre el condado
Los dirigentes de Trebiño y La Puebla, tristes no tanto por el premio como por la falta de soluciones para sus localidades
vitoria.Trebiño Araba da fue una expresión recurrente, en boca de representantes de diferentes colores políticos, ayer en la sesión plenaria de las Juntas Generales. La reivindicación unánime de los partidos de que el condado integre el territorio alavés no fue suficiente para que hubiera un acuerdo para aprobar, a propuesta del PNV, que la Diputación concediera a los alcaldes de Trebiño y La Puebla de Arganzón la Medalla de Álava. PP y PSE sumaron sus votos para rechazar una iniciativa que, según criticaron, "recrudecería" las posiciones en torno a los actuales terrenos de Castilla y León.
El portavoz jeltzale en la Cámara, Álvaro Iturritxa, defendió la concesión del galardón a los máximos representantes de ambas localidades para reconocer su "perseverancia" a la hora de luchar contra "un injusto anacronismo" en el que, según criticó, se ha puesto de manifiesto la "doble moral" de algunos partidos: el PNV criticó el pasado día 8 que el PP tenga una postura en Castilla y León y otra en Álava.
Estas palabras desviaron el debate hacia la necesidad de que el condado pase a integrar el territorio. En este sentido, el representante popular Alfredo Marco Tabar subrayó la postura "nítida y constante" del Ejecutivo foral al exigir la anexión de Trebiño siempre a través del "respeto a los estatutos".
Los alcaldes de Trebiño y La Puebla, Juan Carlos Aguillo y Alfredo Oraá, consideraron "lamentable" que, a pesar de que todos los grupos desean que la zona sea alavesa, "cada uno vaya por su lado y, al final, nadie haga nada". Ambos dirigentes se mostraron "decepcionados" por "la actitud de los partidos".
Y es que, mientras el PNV defendió la concesión de la Medalla de Álava a los alcaldes, EA propuso que a esta distinción se añadieran diversas asociaciones de la zona, y el PSE que el galardón fuera para todos los alcaldes del territorio, además de los mandatarios treviñeses.
Los socialistas sumaron sus votos al PP para descartar las posibilidades nacionalistas, aunque su propia enmienda estuvo a punto de aprobarse, con el apoyo del PNV, pero no salió adelante por no hallarse todos los junteros en la sala durante la votación. Los jeltzales explicaron que sus alcaldes hubieran rechazado el premio para dar más peso al papel de los representantes de Trebiño.
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